Y aquí estamos. Uno frente al otro.
Un día usas mi cuello cómo única fuente de energía y otras tantas no reconoces mi cara entre la gente.
Que eres capaz de manejar mi estado de ánimo, y ni te das cuenta.
Que esto es tan complicado, complejo, incluso, alocado, que no voy a acostumbrarme nunca.
Un día usas mi cuello cómo única fuente de energía y otras tantas no reconoces mi cara entre la gente.
Que eres capaz de manejar mi estado de ánimo, y ni te das cuenta.
Que esto es tan complicado, complejo, incluso, alocado, que no voy a acostumbrarme nunca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario