domingo, 18 de noviembre de 2012

“Aquí estaré hasta que ya no quede nada.”










Éramos un infinito nadando entre los mares de la vida.
Les echábamos carreras a los peces como si de juegos tratase. Y qué bien se nos daba eso de parecer delfines en nuestra cama. 
Y de pronto la corriente nos llevó, como cuando estás en la playa y viene la ola más grande que jamás has visto... esta no pudimos saltarla, ni esquivarla. Y no nos dio tiempo a sumergirnos entre las sábanas, ni siquiera entre los huecos de nuestro sofá.
Nos ahogamos. Como las velas se apagan, las puertas se cierra, las bombillas se funden.
Y entonces, yo te eché de menos.
Los "siempre" fueron "nunca más"
Y los "te quiero" se convirtieron en pequeños arañazos por todo el cuerpo.
¿Cómo quieres que me recupere? Si mi corazón aun está calado de tus besos.
Y así vamos, tú siendo el aire de mis pulmones y yo el borrón que se queda tras mal borrar nuestra historia a lápiz.
Y a pie de esquina, en pequeñito quedan mis ganas de abrazarte y mis triste despedida.
“Aquí estaré hasta que ya no quede nada.”

1 comentario:

Lia Black dijo...

Borracha de tu blog me he vuelto, y me encantan tus imagenes y tu manera de expresarte, te sigo :) te dejo mi blog por si te quieres pasar http://flashbacks13.blogspot.com.es/