miércoles, 14 de noviembre de 2012

RVS


No siempre salen las cosas como quisiéramos.
Y o, por ejemplo, quisiera estar contigo, chico de las cosquillas, acostarme en la cama, apretar los ojos muy, muy fuerte y al despertar *PUAF* estar en tu cama. O en tu sofá, o tu cocina, incluso viendo como tocas el piano mientras leo (magico). Pero contigo.

No hay comentarios: