La madurez, cómo la inteligencia, escasea en muchos. ¡Bienvenidos neardentales!
Verde: Te repito y repetire: mira que podrías intentar entender o comprenderlo durante muchísimo tiempo pero jamás podrías imaginar lo que yo siento por ti. [...] Pero si tengo que pasar este y mil traspiés con el precio de verte acurrucada en mi sofá que vengan. Te ami mi vida.
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